Fernando Alonso ha hecho historia al ganar el primer Premio del Circuito Madrid Jarama-RACE, un prestigioso reconocimiento destinado a celebrar las contribuciones notables al automovilismo y la movilidad en España. El bicampeón de Fórmula 1 fue seleccionado de manera unánime para este honor por un jurado convocado por la federación española de automóviles. Este premio resalta no solo los logros sobresalientes de Alonso en las carreras, sino también su influencia duradera en el desarrollo del automovilismo en España.
La ceremonia de entrega del premio se llevó a cabo recientemente, donde Alonso recibió su galardón de manos de Carmelo Sanz de Barros, presidente de RACE, junto a Ignacio Fernández, director del Circuito Madrid Jarama-RACE. Este nuevo reconocimiento está diseñado para destacar a figuras significativas en el automovilismo español, reconociendo a aquellos que han impactado el patrimonio de carreras y las iniciativas de movilidad del país. La selección de Alonso refleja su profundo compromiso con el avance del automovilismo en España.
La federación española de automóviles enfatizó que la selección de Alonso se debió a su “excepcional contribución a la promoción del automovilismo en nuestro país”. Su fuerte vínculo con el Circuito Madrid Jarama-RACE, establecido a través de numerosos eventos y actividades, también fue un factor significativo en su victoria. Esta conexión subraya cuán integral ha sido para fomentar una cultura vibrante de automovilismo en España.
Ubicado a solo 32 kilómetros al norte de Madrid, el Circuito Madrid Jarama-RACE ha sido un pilar del automovilismo en España desde que pasó a estar bajo la propiedad del Real Automóvil Club de España en 1981. Cabe destacar que ha acogido el Gran Premio de España de F1 en nueve ocasiones, siendo la última en 1981. Este circuito ha sido fundamental en la configuración del paisaje del automovilismo en la región, y la participación de Alonso eleva aún más su legado.
Al reflexionar sobre los logros de Alonso, queda claro que sus contribuciones van más allá de la pista. Al recibir el primer Premio del Circuito Madrid Jarama-RACE, no solo consolida su estatus como leyenda en el automovilismo, sino que también inspira a la próxima generación de pilotos en España. Su trayectoria sirve como un recordatorio del profundo impacto que un solo atleta puede tener en un deporte y su comunidad.